Provincia de Buenos Aires: lectura divergente

Rearmado de la provincia, con la menor participación desde 1985. Hay que comparar peras con peras y replantear el sistema.

POLÍTICAOPINIÓN

Juan José Alonso

9/8/20252 min read

Provincia de Buenos Aires: lectura divergente

Tras las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, los analistas políticos y periodistas han resonado con fuertes críticas al gobierno nacional. Le sumaron también un fuerte descargo por los embates recibidos desde las líneas de la Libertad Avanza, y crearon un escenario oscuro y dramático por una derrota electoral que pocos leen en profundidad.


La foto de los diarios y el imaginario colectivo es un enorme triunfo, aplastante y aleccionador para el oficialismo provincial. La lectura es: Axel Kicillof derrotó a Milei en las urnas. La simplificación es tal, que posiblemente en algunas semanas todos sean nuevamente sorprendidos por los resultados, cuando llegue el momento de votar por las bancas del Congreso Nacional.

Antes de analizar la cuestión política y electoral, hay un gran candidato oculto que nadie analiza ni mide. El 40% del padrón electoral de la provincia eligió no votar, siendo el récord desde 1985. Ni siquiera se acercaron a las escuelas. Son casi 5 millones y medio de votantes. Se suma el 5,5% de votos blancos o nulos donde ningún candidato convenció.


Los números para tener presentes. La boleta que en 2021 representó genuinamente a candidatos cercanos a Milei, obtuvo 6,6% de los votos. La alianza Juntos (Pro + UCR), quedó segunda con 37,2%, y el Frente de Todos el 42,1%. Juntos terminó por disolverse y se dispersó en Hechos, con gran parte del radicalismo, o en Somos una diversidad entre radicales y peronistas no kirchneristas.

También sucede, que además de aquel rearmado de la provincia, las secciones electorales tienen particularidades locales que juegan muy fuerte. Por ejemplo, la Segunda Sección tiene a Hechos (los Passaglia de San Nicolás) como un importante jugador que hizo una gran elección. En 2021, Juntos reunió más de 205.000 votos, y en la elección del domingo, La Libertad Avanza sacó 113.000, Hechos 91.000 y Potencia 10.000. Posiblemente estemos hablando de un mismo electorado que se dividió. En cambio el kirchnerismo obtuvo 137.000 hace cuatro años, y 135.000 votos en la última elección.


El mismo caso puede verificarse en la Tercera Sección, donde el kirchnerismo cosechó 166.000 votos más que en 2021, cuando obtuvo 1.450.000. En aquel entonces, Juntos sacó 1.028.000. Ahora, 851.000 fueron para La Libertad Avanza, 96.000 Nuevos Aires (Marcelo D´Alessandro), 84.000 Somos, 24.000 Potencia, y 18.000 Partido Libertario. Una dispersión podría explicar el nuevo resultado.

En la Legislatura Bonaerense, observaremos que el bloque de diputados kirchnerista pasará de 37 a 39; La Libertad Avanza crecerá de 25 a 31; Hechos conseguirá 3 bancas; y Somos perderá cinco diputados quedándose con 6. En Senado, Frente Patria llegará a 24 bancas; La Libertad Avanza de 12 a 15; y tanto Somos como Hechos renovarán sus bancas.

En conclusión, la baja participación histórica demuestra que no es un gobierno o una boleta la que está en jaque, sino que el propio sistema no encuentra hacer pie en la realidad. Las problemáticas sociales ya no son tales, y debemos referirnos a problemáticas humanitarias. La pobreza, los índices humanitarios y los pésimos resultados educativos, no dan tregua y las cosas no suceden porque sí.


Juan José Alonso (Abogado)